ESPAÑA - BÉLGICA

Los simpáticos muchachos de Bélgica no se jugaban nada, sólo la honrilla de ganar, si podían al prestigioso equipo español. El partido dio comienzo a las 22 horas en el Estadio Municipal, sede del Real Club Deportivo de La Coruña. No tardó mucho en ponerse de manifiesto que no podían aunque el primer gol se hizo esperar y solo se materializó transcurridos 41 minutos del comienzo con un certero tiro raso de Silva a un pase de factura intachable de Villa. Muy poco tiempo después “el director de la orquesta” dio por concluida la primera parte y a los espectadores se nos quedó un regustillo a poco.
En el tiempo transcurrido, correspondió el 61% de retención a nuestros bravos, lo que nos ahorra explicar cual de los dos contendientes dominó en esta primera parte. No es que los belgas fueran mancos y por ello les concedemos la gracia de ser de segunda división que no está nada mal, díganselo sino a mi homónimo presidente del Betis.
Torres no estuvo a su propia altura y el “mister”, con muy buen criterio, lo reemplazó al poco del comienzo del segundo periodo por Riera. Esta segunda parte empezó fulminantemente en cuanto a goles se refiere y así el segundo gol del partido, obra de Villa, se incrustó en la malla de los belgas solo 4 minutos después del comienzo de la segunda parte.
Las palmas del respetable echaban humo y cuando este humo aún no se había disipado, Piqué, para no ser menos que su compañero, hizo lo mismo sólo tres minutos después. Aún nos recrearon nuestros muchachos con dos goles más, con todo lo cual fue menester que los de la roja salieran al campo a recibir el homenaje del respetable, dando por segura ya la clasificación para el mundial.
Resumiendo, dos goles de Villa, dos de Silva y uno de Piqué, sumamos cinco y añadiendo que, una vez más, nuestro capitán mantuvo su puerta inmaculada, tendremos cinco a cero. Que es un resultado más que añadir al palmarés del deporte español.

Bloggero Invitado: Avi.